“En Antioquia, la emergencia climática es una apuesta política. Es una respuesta de responsabilidad social con el Departamento y con el ambiente. Es verdad que no existe una normativa que diga qué hacer frente al tema, pero la estamos construyendo y el primer paso fue hacer la declaración. Aquí nos podemos quedar divagando y esperando a que salga la norma, la Ley”, dijo para el podcast de Territorios Sostenibles el secretario de Medio Ambiente de Antioquia, Carlos Ignacio Uribe.
No muy distante de lo que dice el funcionario encargado de liderar las acciones en beneficio del cambio climático en el Departamento es lo que afirma Low Carbon City (un movimiento global, liderado por ciudadanos que crea soluciones colectivas para abordar el cambio climático) “una declaración de emergencia climática es en gran parte simbólica, es un medio para involucrar y movilizar partes interesadas para decir la verdad sobre la gravedad de esta problemática y el colapso ecológico y para hacer compromisos significativos sobre cómo abordarlos”.
Y es que en este ejercicio de “reducir urgentemente las emisiones de carbono y preparar a los principales interesados para la adaptación y la resiliencia ante impactos negativos irreversibles”, como la firma Low Carbon, el departamento de Antioquia incluyó en el Plan de Desarrollo, aprobado el pasado 30 de marzo, 52 programas, orientados “hacia la adaptación al cambio climático”, indicó Uribe, quien agregó que cada una de las acciones están enmarcadas en temas como Urbanismo, agua, residuos, movilidad, gestión del riesgo, energía, educación, equidad, agricultura, alimentación, planificación, aire, entre otros.
He ahí la razón por la cual, la emergencia climática es para Low Carbon, “el proceso por el cual una autoridad competente –en este caso la Gobernación de Antioquia- declara oficialmente que su institución ha reconocido el cambio climático como una emergencia y apoya acciones urgentes y drásticas para abordarlo. Esto significa posicionar la mitigación y adaptación al cambio climático al centro de todas las decisiones y estrategias de planificación”.
Esa apuesta, que nuestras audiencias pueden leer en la línea 3 del “Plan de Desarrollo de Antioquia 2020-2023”, llamada Nuestro Planeta, cuyo enfoque principal está direccionado al cambio climático, implicaría recursos para el Departamento por una cifra cercana a los $3.5 billones.
Ahora lo que Antioquia espera, es que Colombia haga lo propio y escuche el clamor de la Mesa de Conversación Nacional Ambiental, un espacio de diálogo que tiene que ver con la urgencia de la emergencia climática, y se lo hecho saber al presidente Iván Duque y al ministro de Ambiente, Ricardo Lozano Picón, que “el clima extremo está pasando factura”, y que esa es la razón para declararla.
Si quiere conocer o recordar qué es la emergencia climática, las razones que llevaron a Antioquia a declararla y las inversiones que implicarán haberla declarado, les invitamos a que escuchen los podcasts 1 y 2 de Territorios Sostenibles, Periodismo y conversación al natural. Nuestro primer invitado es Carlos Ignacio Uribe, secretario de Medio Ambiente de Antioquia.